PRESENTACIÓN DE VICTORIA SASTRE

No puedo lamentarme por la vida que he vivido, rara vez me he privado de mis deseos por inusuales que parezcan. Un día escribiré una autobiografía aunque nadie o pocos la lean; todos consideramos como única nuestra existencia, pero eso no la hace menos meritoria.

Desde la niñez tuve una marcada melancolía, mi desmedida introversión siempre fue un impedimento para relacionarme con los otros chiquillos de mi edad. Este suceso ha marcado mi personalidad en la adultez y me he convertido en una persona un tanto solitaria. Creo que impera la maldad y también la ignorancia,  pero no soy misántropa, pues tengo esperanza en la capacidad de resurgimiento del ser humano. 

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Al menos he vivido una vida de excesos de pasión donde he antepuesto mis anhelos y apetitos a todo lo demás. He empezado tres carreras, Pedagogía, Psicología e Historia del Arte, y he realizado múltiples cursos de diferentes materias, como Teología o Filosofía. Siempre recordaré las lecciones de Taxidermia y mis días disecando bichos. Desde siempre me ha fascinado el coleccionismo, llegando a mantener más de una treintena de tarántulas. A ello se han sumado otras compilaciones: muñecas antiguas, minerales, máscaras tribales, objetos enigmáticos... Como muchos sabéis, lo más reciente es mi afición filatélica y epistolar. 

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He tenido animales exóticos y domésticos de todo tipo y condición que siempre me han brindado un gran entretenimiento y alegría. También empecé un curso de Tanatopraxia que abandoné pronto. Dispongo de algunas armas de aire comprimido y me relaja mucho hacer puntería, ¡Suelo acertar al blanco!

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He asistido contadas noches a clubs nocturnos sólo para consumir algunas copas e intentar inspirarme como el gran maestro Toulouse Lautrec, pero nunca me gustaron esos ambientes  y las musas no acudieron jamás. Me imbuye más el camposanto, ahí sí he escrito y dibujados bellos poemas e ilustraciones...

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Mi obra ha sido expuesta en diversas ocasiones, normalmente en cafés, pero también en alguna que otra galería. En definitiva, podría seguir hablando de muchas cosas, pues me las he dejado en el tintero. Como os he dicho, algún día me gustaría escribir algo al respecto...

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Como ya he dicho, sé que todos tenemos unas vivencias que son únicas; me considero una persona corriente y mis pocos amigos saben que soy muy tratable.

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